Qué es el “backpacking”?
En teoría, el “backpacking” es una combinación de senderismo y camping, donde llevas todo lo que necesitas en tu mochila por varios días. Pero en la práctica, es mucho más que eso; es una experiencia de vida que te transforma!! Cada viaje te enfrenta a retos físicos y mentales que te sacan de tu zona de comfort, y te enseña tanto sobre tus propias capacidades como sobre el mundo que te rodea.
Parte de la experiencia incluye una planificación de la ruta, el uso de un mapa para navegar por terrenos inhóspitos, y un nmanejo de riesgos como el clima impredecible y otros peligros naturales. Cargar con todo lo necesario - desde la comida hasta el equipo para cocinar - te obliga a ser autosuficiente y a vivir de manera super simple pero significativa. Cada decisión cuenta, desde elegir un buen lugar para acampar hasta asegurarte de dejar el sitio tal como lo encontraste. No es solo una actividad al aire libre, es un viaje de autodescubrimiento que te conecta profundamente con la naturaleza y te hace redescubrirte a ti mismo…
También hay el “backpacking” de mochilero turístico, donde viajas con una mochila por diferentes ciudades y países, pero de eso no vamos a hablar aquí :)
Mi primera vez haciendo “backpacking”
En enero de 2021, participé en una expedición de 12 días con Kingue Escuela de Aventura en los Llanganates (Ecuador). Todavía tenía 24 años, y fui la más chiquita y una de las menos experimentadas del grupo. Nunca había caminado con tanto peso, acampado tantos días seguidos, ni estado desconectada de la tecnología por tanto tiempo… y me cambió la vida!! Aprendí que nuestras mentes y cuerpos son increíblemente fuertes y capaces, y que, si pones un pie delante del otro, inevitablemente llegarás a tu destino.
Esta experiencia me hizo valorar aún más nuestro país. Después de haber vivido y viajado en otros lugares, estoy más segura que nunca de que amo vivir en Ecuador y que quiero explorarlo y cuidarlo por el resto de mi vida! Conviví con personas muy diferentes a mí y hubo situaciones difíciles que me enseñaron mucho. Me certifiqué como Leave No Trace Master Educator, principios que ahora guían mi vida. Desde ese entonces mi vida empezó a girar entorno a los outdoors.
Me divertí, hice fotos hermosas y recuerdos y amigos para toda la vida. Aprendí que todo lo esencial entra en una mochila… También creció mi confianza en Dios para lo que está fuera de mi control, como mi familia y circunstancias en Quito. Y descubrí lo increíbles que son las botas Venus (una historia para otro día).
Siguientes experiencias haciendo “backpacking”
Aunque subí muchas montañas, aprendí a escalar, bucear, y hacer enduro en la bici, no tuve la oportunidad de volver a hacer backpacking hasta el 2022, cuando comencé a acompañar a mi novio en la documentación de glaciares para su proyecto Paisajes Efímeros. Estas expediciones han sido experiencias profundas, duras y gratificantes. Hemos hecho viajes de entre 3 y 6 días, limitados por el trabajo, aunque sería mucho más provechoso tener más tiempo :).
He pasado por mucho: desde dolores de cabeza intensos por la altura combinada con deshidratación, hasta usar goggles dentro de la carpa para protegerme de vientos de verano que arrastraba arena, hasta sentirla en mis dientes. Una vez, dormimos abajo de una piedra en una como cuevita porque no podíamos armar la carpa. Hemos tenido que cambiar rutas, improvisar, y usar cordinos para jalar maletas. Aún no hemos escalado nada con cuerda durante expediciones.
Aunque siempre hay algo nuevo que aprender, ahora me siento más independiente afuera... Una vez me preguntaron, “y nunca te vas sola?”, A lo que respondo: no, tengo la suerte de tener una pareja increíble, un compañero de aventuras vehemente, cuidadoso y hábil en este tipo de viajes y en la vida. A él le gusta hacer backpacking solo, pero por ahora, no me inquieta probarlo... al menos, no todavía!! Aquí puedes leer sobre uno de nuestros viajes de backpacking.
Lo más difícil…
Lo que muchos temen: el aspecto físico. El dolor en los hombros, los pies, la cintura, que se intensifica con cada paso… (Para eso entreno en casa a distancia con @drgabrielamoreno). Pero más duro aún es el control de la mente, que a veces se convierte en tu peor enemigo, sembrando dudas sobre si serás capaz de lograrlo. La toma de decisiones constante que pesa psicológicamente: seguimos adelante o dejamos el campamento armado para explorar? Llevamos todo de una vez o hacemos varios viajes? Se despejará el clima?? Será que hay agua más allá? Y luego están las diferencias de opinión con tu compañero: yo quiero seguir, pero él no, o viceversa. Todo esto se suma a los retos que hacen del backpacking una experiencia tan intensa como gratificante.
Lo más lindo y gratificante
La compañía y las conversaciones profundas que surgen en la naturaleza, las vistas que te dejan sin aliento, que a veces te hacen llorar, y la satisfacción inmensa de superar un reto. El silencio, la comida que sabe a gloria después de un día durísimo, y la gratitud por cada pequeña cosa: un sorbo de agua,un rayo de sol que sale entre las nubes, un animalito que te observa desde lejos.
Es una conexión profunda con tu entorno, un regreso a lo básico. En esos momentos, como mencioné antes, te das cuenta de que todo lo que necesitas para vivir está en esa mochila que cargas, y eso te da una sensación de plenitud incomparable. Me sorprende siempre cómo lo que antes parecía imposible, ahora se siente como una victoria personal, como un abrazo al corazón, y esa es una de las razones por las que seguiré aventurándome una y otra vez.
Estas imágenes, al igual que todas las de esta página web, están protegidas por derechos de autor de Anna Nicole Arteaga. Todos los derechos reservados. Prohibido el uso no autorizado.
El sentido de la exploración
Algo que amo de hacer backpacking es el sentido de aventura y exploración que es inevitable. Muchas otras actividades al aire libre que disfruto tienen sus limitaciones. Están dentro de lugares fijos, con horarios y muchas restricciones. En la bici, te limitas a la ruta; en el tennis, no te mueves del sitio; en el speedflying (una nueva modalidad del parapente), todavía no logro salir del Casitagua o Canoa hasta subir mi nivel. Pero en el backpacking, Diosito… A veces sientes que el mundo es tuyo. Te sientes tan pequeño, tan libre! Siempre y cuando cuides tu entorno, no te mates, y no dejes rastro, tú decides adónde ir, cuándo, cómo y por qué. Y en mi opinión, así debe ser la aventura. <3
Siento que cuando todo es muy estructurado, se pierde un poco el sentido de la aventura y el desafío personal. Cuál es el chiste si todo está marcado y no hay manera de equivocarte? Cómo realmente aprendes y creces? Tienes muchas responsabilidades, y es importante recordar que, al final del día, siempre hay más por descubrir y aprender. Debe ser parecido en el bikepacking (backpacking en bici), aunque aún no lo he hecho - pero me encantaría. Cada nueva ruta que exploro es una oportunidad no solo de aprender y crecer, sino de hacerlo con humildad, reconociendo que la naturaleza siempre tiene la última palabra. Y eso es lo que realmente me impulsa a seguir aventurándome.
Lecciones
He aprendido que el éxito en el backpacking comienza con lo básico: cómo empacar, cómo navegar, y cómo manejar tus desechos. Prepararse para gestionar el agua es esencial; siempre asegúrate de mantenerte hidratado y comido. La precaución es clave para que el cuerpo no sufra!! Más allá de seguir los principios de “Leave No Trace” he descubierto que hay muchas maneras de hacer backpacking. Desde cómo armar tu mochila hasta qué comida llevar, ya tengo mis preferencias bien definidas. A veces, algo se nos olvida, y eso nos obliga a improvisar, lo que permite que la creatividad florezca.
Afrontar la adversidad, crecer en resiliencia mental y comunicarte eficazmente con tu equipo son habilidades cruciales que he ido puliendo... Cada viaje presenta nuevos retos, y cada uno de ellos me enseña a adaptarme y a encontrar soluciones sobre la marcha. Creo que en el fondo, lo que nos motiva es el amor por estar afuera, por sentirnos vivos, las ganas y la curiosidad de conocer estos sitios lejanos, que parecen de cuento de hadas, porque lo son.
Recomendaciones
Habrá todo un blog post (o quizá una guía) con mis tips de backpacking!! In the mean time, te dejo mi guía completa sobre cómo manejar tu periodo al aire libre aquí, debes ingresar usando la clave “Welcome”.
Ironías de la vida
Con Andrés empezamos a planificar un viaje para fin de año. Todos los lugares con los que soñamos visitar en Sudamérica estarán llenos de gente. Así que un día, viendo videos y reviews, nos miramos y coincidimos en quedarnos aquí, en Ecuador, nuestro país, ya que hay tanto por explorar y descubrir haciendo “backpacking” - nuestras queridas expediciones, como las llamamos - con el fin de seguir retratando lo que queda de nuestros glaciares tropicales. Sabemos que no nos cruzaremos con nadie. Así de locos estamos, pero así de grande es nuestro amor por salir afuera a estos sitios hermosos, no topados, dejándolos tal como los encontramos. No sé si esto se ajusta a la idea de una “vacación” para muchos, pero a nosotros nos emociona, nos llena, nos agota, nos une, y es increíblemente gratificante.
Sorpresas y Motivación
Hice una encuesta en mi cuenta de IG sobre el backpacking, y me sorprendí de que mucha más gente de la que me imaginaba ha hecho backpacking, y le encanta! Sería lindo hacerlo juntos, déjame un comentario si te gusta hacer backpacking!! En mi próximo newsletter, haré un giveaway entre las personas que están suscritas. Gracias por leerme, gracias por sus comentarios y conversaciones. Espero les sirva este post!!
Si no te has suscrito a mi newsletter ‘The Wild Feelings Club”, haz clic aquí!
Con amor,
-Anna Nicole